Las mejores películas de terror de Laura Trotter
Laura Trotter (Trento, 9 de Junio de 1950) es una actriz italiana.
Hizo su debut en el cine a mediados de los años setenta en la película Telefoni bianchi (1976), dirigida por Dino Risi, coincidiendo con la explosión de la vena de la comedia erótica italiana y las películas de explotación.
También fue intérprete de películas b y películas del género poliziottesco y de ciencia ficción (entre otras, Io ho paura e L'avvertimento, dirigida por Damiano Damiani, e Incubo sul città contaminata, dirigida por Umberto Lenzi, ambas desde 1980).
En televisión, ha participado en varias transmisiones de radio y televisión de RAI, Mediaset y Suiza-Italia.
La invasión de los zombies atómicos
5,6/10
Los pasajeros de un avión que acompañan en el vuelo a un científico nuclear son sometidos a una radiación que les convertirá en los más sanguinarios zombies. El problema para la humanidad vendrá cuando aterrizen y siembren el caos.
El ojo en la oscuridad
5,9/10
En una estación española de veraneo comienzan a aparecer muchachas asesinadas a las cuales se ha arrancado un ojo. Y dicen quienes creen haberlo visto, que el asesino es un hombre cubierto con una capucha y una capa rojas.
Miami Golem
3,7/10
Un profesor y su ayudante se tendrán que enfrentar cara a cara con una poderosa fuerza extraterrestre al salirles mal un experimento.
La séptima mujer
5,6/10
La hermana Cristina, una monja que se encarga de un grupo de chicas, las lleva a pasar un fin de semana a una casa alejada de la población, para celebrar la entrada del verano. Pero alli no estarán solas, hay tres gamberros que se dedican a aterrorizarlas y a violarlas. Cuando la hermana Cristina se da cuenta, ésta emprende una sangrienta venganza hacia los delincuentes.
Poseida
4,6/10
La estadounidense Amanda Holbrook se casa con el conde Andrea Orsomandi después de un breve noviazgo, y pronto se van a vivir a la casa de él. Un día la mujer accidentalmente abre la puerta de una habitación y se encuentran con el cadáver de un anciano acostado en una cama rodeada por cuatro velas.
