Las mejores comedias de Morgan Upton

Bill McKay es un idealista abogado de California que destaca por defender los derechos civiles o las causas ecológicas. Pero también por ser hijo de John J. McKay, antiguo gobernador demócrata del Estado. Ante las elecciones de 1972, el partido le elige para presentarse como candidato a arrebatar el puesto en el senado que ocupa el republicano Crocker Jamon. Bill sabe que tiene pocas posibilidades de ganar y accede con una única condición: poder decir lo que piensa en todo momento. Pero las cosas cambian cuando su honestidad seduce inesperadamente al electorado.

El primer autobús nuclear; una monstruosidad de 75 toneladas con 32 ruedas enormes, realiza su viaje inaugural desde Nueva York hasta Denver. Al mando del autobús más grande del mundo está, por supuesto el conductor más grande del mundo. Su co-piloto es propenso a tener desmayos repentinos y tiene especial predilección por conducir cerca del borde del camino. Además, un par de malhechores pretenden destruir el autobús.

Mientras disfruta de la fiesta del 25 aniversario de graduación con sus compañeros de promoción, Peggy Sue se desmaya y se despierta en su propio pasado. Con la experiencia que le dan los años intentará enmendar los errores cometidos.

Donald Quinelle, un exitoso ejecutivo de ventas, es despedido por culpa del loro de su jefe justo el mismo día en que Sonny Paluso ve cómo su gasolinera salta por los aires. Mientras comparten sus penas en una cafetería, los dos neoyorquinos desarman al aspirante a bandido Jack Locke, con lo que se convierten en héroes mediáticos de la noche a la mañana. Rápidamente van a descubrir lo que significa intentar sobrevivir en un mundo totalmente desquiciado.

Durante un verano, el joven amantes de los coches Kenny Dantley (Mark Hamill) consigue customizar un Chevrolet Corvette junto a sus amigos, y bautizan al coche como Stingray, pero pronto se lo roban y el joven inmediatamente intentará perseguir a los ladrones hasta Las Vegas.

Iris (Jane Fonda) es una prostituta afable cuya juguetona clientela incluye a personas importantes del ayuntamiento. Pero ella es fiel a Jesé Veldini (Sutherland), un desenfrenado en libertad condicional que está desesperado por reiniciar su carrera como piloto de carreras de demolición. El regreso de Veldini podría arruinar la campaña de reelección de su ambicioso hermano (Howard Hesseman) como fiscal del distrito, así que se toman medidas para que el ex-presidiario no se salga de la raya... (filmaffinit) Quintaesencia del cine con pretensiones inconformistas que Hollywood promovió durante los años setenta, esta comedia de aventuras constituye una de estas rarezas que el tiempo se ha encargado de diluir en el campo de lo ìncomprensible. Planteada en un tono de humor absurdo, recargado con los preceptivos latiguillos progres, su capacidad de convicción es más bien escasa, proporcionando una diversión muy discreta. (fotogramas.es)