Las mejores musicales de Jim Broadbent
Nació en Lincoln, hijo de Doreen "Dee" Findlay, una escultora, y Roy Laverick Broadbent, un artista, escultor y diseñador de interiores.12 Los padres de Broadbent fueron actores aficionados y fundaron el grupo teatral Holton Players.3 Tuvo una hermana melliza que murió al nacer. Broadbent estudió en la Leighton Park School, una escuela cuáquera ubicada en Reading.4 Posteriormente estudió en la London Academy of Music and Dramatic Art.
Moulin Rouge
7,6/10
París, alrededor de 1900. El mundo ha sido conquistado por la revolución de Bohemia. Satine, la estrella más rutilante del Moulin Rouge, encandila a toda la ciudad con sus bailes llenos de sensualidad y su enorme belleza. Atrapada entre el amor de Christian, un joven escritor, y la obsesión del duque, lucha por hacer realidad su sueño de convertirse en actriz. Pero, en un mundo en el que vale todo excepto enamorarse, nada es fácil.
Topsy-Turvy
7,3/10
Drama musical ambientado en el siglo XIX. Narra la rivalidad entre dos artistas londinenses: Gilbert y Sullivan, guionista y compositor respectivamente. Gilbert (Broadbent) es un auténtico caballero. Sullivan (Corduner), en cambio, es casi un libertino. Durante años, los dos trabajaron juntos deleitando al público con sus populares óperas cómicas. Pero, en 1884, al no contar su última obra con el apoyo de la crítica, las diferencias entre ellos salieron a flote. Sullivan quiso dejar a Gilbert para componer música más seria; pero ambos estaban obligados contractualmente a hacer un nuevo trabajo. (FILMAFFINITY)
La rockera
6,8/10
Kate (Hazel O'Connor) es una excéntrica cantante de música New Wave, su aspecto es bastante estrafalario y escribe letras de gran contenido social. En su cruzada antisistema, lo que más detesta es la industria discográfica. Sin embargo, cuando Danny (Phil Daniels) le ofrece ser su mánager, acaba aceptando. En su camino hacia el estrellato va perdiendo poco a poco sus principios. En una Inglaterra convulsionada por las huelgas, el paro y los enfrentamientos callejeros, Breaking Glass retrata la corrupta industria musical que convierte en mercancía de consumo y en moda pasajera incluso la más subversiva de las culturas juveniles. Mención especial a la banda sonora interpretada por Hazel O'Connor.
