Las mejores comedias de Perico Chicote
Pedro "Perico" Chicote (Madrid, 13 de mayo de 1899-Madrid, 25 de diciembre de 1977) fue un popular hostelero español, propietario del Museo Chicote, antes conocido como Bar Chicote, en la Gran Vía madrileña.
Historias de la televisión
5,5/10
Felipe, hijo del guarda de un zoológico, es un incansable profesional de todos los concursos televisivos. Katy es una muchacha que sueña con llegar a ser una cantante famosa y que, seleccionada para un concurso de televisión de ritmos modernos, se enfrenta al problema de que en esa competición sólo pueden actuar los cantantes que ya son famosos. Felipe y Katy se ven unidos por el destino en un concurso, en el que el primer premio consiste en un piso y un pasaje doble para la luna de miel. Una vez en los platós de Televisión Española, serán testigos y protagonistas de una serie interminable de embrollos.
La casa de los Martínez
3/10
Durante la grabación en la casa de los Martínez de un programa de televisión, el señor Martínez ve con desagrado las atenciones de que es objeto su esposa por parte del director. El libro de memorias de la suegra, famosa ex-actriz, complica las cosas. Los Martínez se van a descansar a su pueblo, pero su popularidad los persigue.
¡¡Campeones!!
5,7/10
El portero de un equipo de fútbol firma, sin saberlo, un documento comprometido que le cuesta el despido. El día que se juega un partido muy decisivo, un amigo logra aclarar lo ocurrido, evitando la expulsión del guardameta y la derrota del club.
El rey de las finanzas
Un timador se las ingenia para cubrir a unos empresarios que se escapan de sus mujeres una vez por semana. Lo que empieza como un juego, se convierte en extorsión y así consigue entablar contacto con la alta sociedad, consiguiendo enamorar así a una rica heredera cubana, con la que finalmente consigue casarse.
Fortunato
5,4/10
Fortunato es un pobre hombre, padre de familia, que se ha quedado sin trabajo y prueba suerte en todos los oficios que encuentra. Sin embargo, parece que su nombre no va en consonancia con su situación, ya que, por más que lo intenta, la fortuna no quiere sonreírle.
Héroe a la fuerza
Sin saberlo, pasa por ser el salvador de una muchacha que estuvo a punto de ahogarse. Su falsa proeza le empuja a vivir, a pesar suyo, una serie de líos.
