Las mejores películas de drama de Eulalio González
Eulalio González Ramírez (Los Herreras, Nuevo León, 16 de diciembre de 1921-San Pedro Garza García, Nuevo León, 1 de septiembre de 2003), también conocido como «Lalo» o «El Piporro», fue un actor, locutor, guionista, cantante y compositor de música norteña y de mariachi, considerado como uno de los grandes cómicos de todos los tiempos dentro del cine de oro mexicano. Jesús Martínez «Palillo» le dio el mote «El rey del taconazo» después de una temporada a su lado en el teatro Folies Bergère y debido a su creación: el baile del taconazo, conocido también como redova norteña.
El enamorado
6,8/10
El rey del tomate
7,3/10
El pocho
7,3/10
Espaldas mojadas
7,5/10
La faraona
6,2/10
Pastora Heredia es una guapa gitana con mucho carácter que siempre intenta ayudar a los más necesitados. Un buen día le llega la noticia del fallecimiento de su abuelo, un millonario que vivía en México y que, desde que se enfadó con su padre, no sabía nada de él. Sin embargo, como Pastora era su única nieta y la heredera universal de todos sus bienes, ésta no duda en cruzar el charco para reclamar su herencia. Pero una vez allí resulta que don Guillermo, el abuelo, no está muerto.
Cuidado con el amor
7,4/10
Salvador acompañado de dos amigos de su padre a los que él llama tios, llegan a una feria en el pueblo, ahi conoce a Ana, al ganar una apuesta le pagan con una casa hipotecada, para su sorpresa al entrar en ella se da cuenta de que Ana y su madre Vivian en ella, provocando un enredo divertido pero con un explosivo final.
Ahí viene Martín Corona
6,9/10
Martín Corona, jugador y mujeriego, defiende a los desvalidos, los pobres y los necesitados. Tendrá que defender a una chica española y a su servidor de las garras del maloso del pueblo. No solo tendrá que luchar contra el maloso, sino contra el orgullo de la chica que en principio cree que él es el personaje malo y desconfía de él. Ella muy orgullosa pretendía ponerlo a sus pies, pero había un problema, Martín Corona se debía más a su pueblo que a nadie y ella no estaba dispuesta a arriesgar perderlo, por lo que antes de casarse con él, le hizo jurar que no intervendría en problemas de otros.
Ruletero a toda marcha
7,6/10
Dos gallos en palenque
5,5/10
