Las mejores películas de drama de Freddie Prinze Jr. en Google Play Movies
Freddie James Prinze Jr. (8 de marzo de 1976) es un actor estadounidense, conocido principalmente por sus interpretaciones en películas sobre adolescentes y por ser la voz de Iron Bull, en Dragon Age: Inquisition. En 2010 interpretó al agente Cole Ortiz de la CTU en la famosa serie 24 , Fred Jones en Scooby-Doo y Scooby-Doo 2 Monsters Unleashed. Es hijo del actor Freddie Prinze, a quien nunca conoció, puesto que el tenía 10 meses cuando su padre se suicidó.
Esta chica me pone
5/10
En una universidad de Nueva York, mientras sus amigos se estaban especializando en alcohol, drogas y rock & roll, Al Conelly (Freddie Prinze Jr.), un joven cuyo sueño es convertirse en un renombrado chef, encontró su amor verdadero: Imogen (Julia Stiles), una estudiante de arquitectura. Eran una pareja perfecta. Pero cuando el enamoramiento pasó, ella se fue. Tres años después de la ruptura, Al todavía no se ha sobrepuesto. Echa de menos sus excepcionales ojos, el sexo, su exótica ropa interior, el sexo, su irresistible voz, el sexo, el aroma de su pelo... y el sexo.
Chicos y chicas
5,4/10
Comedia sobre cómo la última persona que podrías imaginar puede acabar siendo la más importante de tu vida. Ryan y Jennifer se conocieron cuando tenían 12 años... y fue odio a primera vista. Pero ocho años después se reencuentran en el instituto, donde estos dos polos opuestos se han convertido en los mejores amigos, lo que significa que se lo pueden explicar todo el uno al otro. Su relación irá haciéndose cada vez más íntima hasta que ocurra lo inevitable.
Almas gemelas
6,5/10
Cuando Lesly decide conocer a la familia de su novio y compartir con ellos mesa y mantel, lo que iba a ser una alegre velada se convierte en una noche loca y de consecuencias imprevisibles. Una ración de sorpresas aliñadas con picantes y oscuros secretos complican más la digestión.
Money Kings
5,8/10
Feliz cumpleaños amor mío
5,8/10
Un hombre joven y apuesto no ha podido superar la muerte de su mujer, fallecida en un accidente náutico. Ni la presencia de su hija adolescente propicia que el hombre tenga el mínimo interés por reconducir su vida, y se limita a salir de noche y esperar a que el espíritu de su mujer se le aparezca a la orilla del mar. La amarga situación inicial irá cambiando cuando otra mujer aparezca en su vida, y le haga dudar sobre la conveniencia de seguir viviendo en una ilusión.
